Ya hace días que vengo pensando en las fechas cuando yo llegue a este país. Quizas algunas cosas que estan pasando en la televisión me esten afectando demaciado la mente. Me he acordado de cuando yo tenia otro pensamiento sobre este país. Pense que cuando yo llegar a Estados Unidos mi vida iba a cambiar para lo mejor, me imagine lo inimaginable. Me soñaba que iba yo a beber en copas de oro y comer de la mejor comida... creo que jugaba mucho a "la comadrita" o al "tea party" como quizas se pueda traducir ahora.
En realidad, lo que pasaba era que mucha gente hablaba de la vida tan diferente del "norte" también conocido en México como los Estados Unidos. No hay escusa, era inexperta y ya. Yo, con tan solo nueve años de edad, no tenía mucha aptitud para reconocer cuando la gente estaba inventandose las cosas o quizás no queria darme cuenta. Es mas, para que decir mas, yo no me daba cuenta ni de la mitad de lo que pasaba alrededor mio, cuando yo me creia sabermelo todo. Nunca me di cuenta que estaba rumbo a Estados Unidos hasta que vi un McDonalds. Ni siquiera sabia para que se usaba un pasaporte... Era tan estupida, siempre lo he sido. Mis padres nunca nos informaron de ningun viaje a Estados Unidos ni a ningun lado, todo vino de repente... y ahi estabamos ahora, rumbo al "norte".
Yo, por supuesto, vomitando el estomago por la boca y casi por los ojos. Literalmente sentia que estaba con lo de adentro hacia afuera. Estaba delirando mas de la mitad del camino porque pues, tomamos un autobus desde el centro de México hasta San Antonio, Texas y de ahí a Houston. Creí que me iba a morir esa vez. De verdad, yo no crei que iba a sobrevivir aquel vomito incesante, el desmayo, el mareo... todo se veia amarillo para mi. Para mi, para mi siempre el mundo ha sido amarillo. El camino hacia el "norte", infinito, amarillo, y vomitado por mi linda boca.
Ni siquiera me acuerdo cuando llegamos a Houston, pero si me acuerdo cuando estuve en San Antonio, TX. Me acuerdo haber visto por primera vez a una persona Afroamericana. Si, como lo oyen, por primera vez. Ahora entienden que soy estupida, no? Quizas influyo que no veia mucha television, a menos que fueran caricaturas. Quizas no sabia ni donde quedaba Africa, es mas. Enseguida me percate de su olor diferente, la gente Afroamericana tenia un olor mas fuerte y no me gustaba. Ahora me siento mal por admitir mi primera impresion de la gente Afroamericana, pero esa fue, a mis nueve años. Quizas ellos al verme también pensaron que apestaba que hubiese otra Mexicanita en Texas, en Estados Unidos. Total, un Mexicano no hace una diferencia positiva para el país, al contrario. Eso sigo pensando hasta el día de hoy. Todavía me siento despreciada por mucha gente aquí, quizas todo este en mi mente.. quizás este en mi mente que cuando alguién dice que es de México se le acaba el interés y llega al punto de la conversación y se marcha. No somos exoticos, somos un problema al país. Ya hay muchos de nosotros, eso dicen...
No me acuerdo cuando llegue a Houston muy bien. Recuerdo las grandes carreteras pero muy apenas porque para mi se me hacia mas importante poder dormir ya que llegamos a altas horas de la noche, quizas de la madrugada... e igual, pudieron haber sido las ocho pero como yo veía ya media muerta me sentia abatida. La ciudad mas o menos la vi, encendida en muchos foquillos...se me hizo diferente a lo que habia antes visto en mi corta y privada vida. Pero lo que no me esperaba era la casa... ni siquiera me paso por la mente como se veria la casa una vez que llegaramos. Todo lo que me importaba en ese instante era llegar, acostarme en una cama, tener sabanas limpias, tener el calor de algo ya que me sentia extrangera, y es que lo era... lo que sigo siendo aquí.
Cual fue mi sorpresa al ver la casa donde ibamos a vivir, a donde mi padre nos habia traido. Era horrible. Creo que en ese momento comprendi lo que era la miseria y la pobreza, en ese mismo instante mis ojos me lo definieron y hasta el momento no ha habido algo que supere a ese lugar en lo sucio y cochambroso. Era un solo cuarto, tenia quizas una sola cama, pero esta tenia como tres colchones puestos encima, en el mismo cuerto estaba la cocina, el refrigerador, un montón de cosas almancenadas para uso de un puesto en un "flea market", y ahi mismo se encontraba la regadera. Bueno, nuestras camas se encontraban arriba de la unica cama en el cuerto. Si, nuestras camas iban a ser unos colchones que serian tirados en el piso, donde se notaba no se habia lavado desde la epoca de los dinosaurios. En ese momento, si me hubiesen mandado a dormir afuera en el pasto me hubiese sentido mas limpia y mas contenta. El olor, uuy, el olor! RUGIA, literalmente repugnaba. Era un olor a rata a excremento y orines de años de abuso de ratas!
Tenia tantas ganas de llorar, de gritar, de hacer una berrincheta para ver si asi me regresaban a mi casa, a mi verdadera cama, en donde no me sentia pobre, donde yo no sentia que fuera miserable, donde no tenia miedo de ser pisada por ratones, ni cucarachas. Aquel cuarto, Dios mío, no tenia remedio, tenia tantas cosas regadas por todas partes, todo, todo, todo en absoluto estaba contaminado. La gente dice que la agua de México te da diarrea e infección, pero si ustedes hubiesen visto este cuarto, si hubiesen probado el agua, se morian en el acto. Es mas, ni bañarte te servia para darte la diminuta ilusión de que estabas limpia porque el agua apestaba a humedad, a podrido... solo Dios sabe de donde vendria esa agua. Además, la zona de la regadera estaba llena de moho, la cortina cubierta de un experimento biologico animal, bestia, infinito. Apestaba, todo te contaminaba. Si la Nasa descubriese esa casa, solo entraria con sus super trajes especiales, de otra manera pensarian que se contajiarian de alguna rabia, de algun hongo, de algun algo... nada bueno, todo malo.
No se cual habra sido la impresion de mi madre, ni de mis dos hermanas... yo estaba en shock, tratando de asimilar lo que ahora seria mi realidad. Estaba enfurecida. Enfurecida porque me sentia engañada, y todo para que? para ver esta miseria, esta tristeza?! Era triste pensar que ibamos a vivir ahi, y aparte, con nuestro tío, hermano de mi padre. Si, adiviniaron, todos en UN SOLO CUARTO. Me sentia triste porque tuve que dejar a mi tía Celina a quién yo quería tanto, a mis abuelitas, a mis abuelitos, a mi escuela a mi todo. Para que, para esta porqueria? Que desilusion, que coraje, me queria morir. De verdad, me queria morir. Todo parecia mejor solucion que vivir en Estados Unidos, en "El Norte. " Nunca me habia sentido querida en Mexico por mis compañeras de escuela ni nada, pero no queria ni imaginarme como seria mi nueva vida escolar... quizas otra vez mas peleas, mas odio hacia mi.
Mas coraje a un fue cuando me entere que mi padre me habia regresado un año escolar porque supuestamente seria mejor para mi aprendisaje del inglés. Creo que el me creia bien estupida, porque no penso que lo empezaria a entender en menos de un año. En fin, el siempre creyo que no servia para nada y que estaba descerebrada. Bueno su forma de pensar, tiene su derecho. Yo lo que pense fue que no sabia ni que año estabamos cruzando y fue por eso que nos puso un año retrazado. Ademas, mas me molesto que Erika, mi hermana, ni siquiera iba a ir a mi escuela. Ibamos a ir a escuelas separadas! Definitivamente, ahora si estaba sola, pense.
Todo en Estados Unidos estaba horrible para mi, todo lo que habia en Mexico me parecia hermoso. Y por un par de años me puse terca y en mi misma mente me dije que yo no iba ha hablar inglés, aunque ya lo entendía. que yo no me someteria a un cambio que yo no pedi. Y no lo hize, por años no hable inglés, ni cambie mi forma de vestir, nada. Estaba enojada con mis padres, conmigo, con la vida misma. Yo solo queria regresar con mis abuelitas, con Chely... ellos me daban alegria, aqui en Estados Unidos, solo habia soledad, ratas, mugre, hongo, y mucha apeste pensaba yo. No fue hasta tres años despúes, más o menos, cuando acepte mi realidad, mi permanencia en Estados Unidos iba a ser definitiva entonces decidi que era mejor superarme que ni seguir en mi terquedad.
Siempre me dedique a mis estudios, pero cuando tome la decisión de finalmente aceptar a este país como mi casa por ahora, pense que era mejor trabajar aun mas duro. Queria poner un buen ejemplo. Me decía que no queria vivir mas entre mugre, entre apestes, entre ratas, entre cucarachas. Pero eso nunca cambio en realidad... Por mucho tiempo me sentia avergonzada de siquiera aceptarme a mi misma donde yo vivia. Se me hacia vergonsozo para mi ego, para mi orgullo... no se, también me daba tristeza ser pobre. Esta es la primera vez que hablo de donde yo vivia... de los lugares que me hizieron sentir mal de ser yo, de ser de Mexico... pero no se si eso tenga que ver.
Antes culpaba a mis padres, pero ya no. Ahora solo digo que ellos hacen lo que pueden en su propio mundo con sus propias reglas que yo les puedo ayudar a ver otro punto de vista, bueno cuando menos a mi madre. Pero ya no les hecho en cara los seis hijos que tuvieron, ya no me importa si algun dia vivimos todos juntos como sardinas, solo me da tristeza de pensar que mis hermanos asi viven. Me hace llorar.. me hace sentir tan impotente, me ruedan lagrimas de mis ojos al pensar que mi madre nunca ha tenido su casa, un lugar descente para vivir. Me dan ganas de gritar, de llorar, de darme contra el pizo contra la pared, contra todo solo de pensar que yo no tengo suficiente dinero para comprarle a mi madre lo mejor a mis hermanos ayudarlos con lo mejor enseñarlos a ser niños responsables y trabajadores... inteligentes. No puedo cambiar el mundo, no puedo cambiar los hechos, pero quiero seguir esforzandome para que un dia mi familia pueda vivir en un lugar normal, fuera de la pobreza y de la conformidad.
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